No nos damos ni cuenta y tomamos una cantidad de azúcar muy elevada, mucho más de la recomendada por la OMS, que es de 25 gramos. Eso no son más de 6 cucharaditas de azúcar al día. Ahora es cuando todos decimos cosas cómo “pero si yo no pongo azúcar en el café” o “pues yo no tomo nada de azúcar, no lo uso apenas”. Pero ¿y el azúcar añadido? ¿Te has fijado alguna vez en las etiquetas?
Déjame decirte que el azúcar se encuentra en la mayoría de los alimentos procesados, incluso en aquellos que no son dulces, como por ejemplo el salmón ahumado y los embutidos, por lo que es muy fácil que estés ingiriendo más azúcar del recomendado, y encima sin saberlo. Si además cada vez hay más estudios que demuestran que el azúcar provoca adicción, lo más recomendable es reducirlo al máximo de la alimentación. Dicho esto, verás que, si eliminas los azúcares añadidos, más de la mitad de los productos del supermercado desparecen de tu lista de la compra: bollería, galletas, cereales, chocolate, barritas, yogures no naturales, postres lácteos, helados, mermeladas, embutidos, salsas, platos preparados, zumos, refrescos, chicles. Todo esto te llevará a dejar de consumir productos y a llenar tu cesta con alimentos frescos y nutritivos de verdad.
Por todo esto es por lo que, en las tres semanas que dura el reto, uno de los hábitos que hay que cumplir es exactamente este: eliminar todos los azúcares y edulcorantes de la dieta. Y ahora deja que adivine tu pregunta: ¿los edulcorantes también? ¿Pero por qué? Pues porque recientes estudios sugieren que también interfieren en el centro de recompensa de nuestro cerebro y crean ansiedad por comer dulces. El único endulzante que permitimos tomar con moderación en las tres semanas es la estevia. Todo lo demás no está permitido, ya sea dextrosa, glucosa, fructosa, sacarosa, maltosa, maltodextrina, miel, jarabe de…, sirope de…, jugo de… (todo estos nombres son azúcar), aspartamo, acesulfamo, sacarina, maltitol, xilitol, sorbitol, E-95X o E-96X (edulcorantes).
Además tanto el azúcar como los edulcorantes interfieren en el gusto y en las papilas gustativas y hacen que cada vez necesitemos “un poco más” para notar el dulce. Verás que después de tres semanas sin azúcar todo te parecerá superdulce. Para ayudarte durante el reto te daremos una tabla en la que están reflejados todos los alimentos permitidos.
¿Qué me dices? ¿Te atreves a probar a tener una vida sugarfree?